"Quiero promover y difundir el mundo rural a través de un servicio educativo innovador"
Andrea Díez Moyano, graduada en Educación Infantil y con una beca ‘RALBAR’ de ULE y Fundación Banco Sabadell, realiza un proyecto con la Junta Vecinal de Valderrueda para transformar y promocionar la infancia en el mundo rural.
Durante julio y agosto imparte actividades educativas, de ocio y sociales dirigidas a la población infantil, con la pretensión de implicar a todo el vecindario.
Creció en un pueblo de la Montaña Oriental Leonesa, a 20 km de Valderrueda, y durante toda su juventud observó la falta de infraestructuras, de empleo y de servicios en el mundo rural. Esa carencia y su defensa de lo rural, la lleva constantemente a idear proyectos que ayuden a fomentar el desarrollo de las comunidades rurales. Una muestra de ello es el proyecto ‘Comunidad de aprendizaje: una oportunidad para transformar y promocionar la infancia y el ocio en el mundo rural’, una propuesta de Andrea Díez Moyano, graduada en Educación Infantil, que presentó a la convocatoria de Becas RALBAR impulsadas por la Universidad de León y la Fundación Banco Sabadell y por la que fue seleccionada junto a otros once estudiantes de entre 24 proyectos presentados.
Se trata de una iniciativa con la que creará una comunidad de aprendizaje rural en Valderrueda, un modelo educativo que ha surgido en los últimos años y que se basa en los principios de inclusión, igualdad y diálogo. “He vivido toda mi vida en Cistierna, en un medio rural y hasta que me fui a vivir a León he visto los problemas con los que diariamente nos encontramos sobre todo desde el cese de la minería y desde que la ganadería y la agricultura está siendo tan castigada en estas zonas rurales”, explica esta joven estudiante que continuará su formación el próximo año en Madrid con un Máster de Educación Especial. Por ello, le parece fundamental “crear e implementar todas las medidas que sean posibles para promover y fomentar su desarrollo y aportar mi granito de arena como miembro del mundo rural”.
Esta joven leonesa desarrolla este proyecto pionero a lo largo de los meses de julio y agosto en Valderrueda con el apoyo de la Junta Vecinal de esta localidad, fruto de un convenio de colaboración con el Ayuntamiento y la Junta Vecinal. Durante ese tiempo, fomenta numerosas actividades para lograr una transformación social en el pueblo potenciando las relaciones sociales y la participación de todos los vecinos, principalmente niños y niñas, a través de acciones lúdicas, sociales y de ocio.
“Mi principal aportación al proyecto Ralbar ha sido crear un servicio educativo, actual e innovador dentro del mundo rural, sin necesidad de una gran cantidad de recursos económicos imprescindibles para poder llevarse a cabo”, detalla Andrea Díez, al tiempo que concreta cómo el proyecto ofrece oportunidades educativas, de ocio, sociales y lúdicas a un gran rango de edades para niños y niñas, “y da la oportunidad de promover la socialización y la participación intergeneracional. En esta comunidad, nadie queda fuera y es un servicio gratuito para todos y todas los vecinos y vecinas de la zona”.
Aunque acaba de estrenar la Beca RALBAR en Valderrueda, Andrea Díez asegura que esta propuesta está contribuyendo en gran medida al desarrollo rural de la localidad, ya que “se están llevando a cabo iniciativas muy bonitas como la creación de contenedores y talleres de reciclaje, un buzón de sugerencias para llevar a cabo propuestas que proponen los vecinos o una gran difusión en redes sociales para dar a conocer este pueblo y todo lo que se puede llegar a hacer con los recursos que ofrece”. Iniciativas que han recibido una elevada implicación y participación del público que se verá incrementado durante la segunda quincena de julio y agosto “por lo que la Comunidad de Aprendizaje que estamos creando llegará a muchísimas más personas”.
En esta Comunidad de Aprendizaje, Díez desarrolla actividades centradas en cuatro temáticas principales (Nuestra Localidad, Nuestra Comunidad, Tradiciones, y Promoción de la infancia en el mundo rural), que se basan en varios Objetivos de Desarrollo Sostenible como son Educación de Calidad, Innovación, Reducción de las Desigualdades o Ciudades Sostenibles, entre otros. Con todo, el proyecto incluye diversas actividades como embellecimiento de la localidad, jornadas de limpieza, rutas y excursiones, tertulias en las que dan a conocer su trabajo y su vida, recuperación de tradiciones olvidadas y juegos tradicionales.
"Con la iniciativa pretendo crear lazos, relaciones sociales y participación en la comunidad, generar relaciones positivas, promover y difundir el mundo rural, realizando actividades actuales dentro de él", cuenta. Además, Andrea Díez ya está realizando una importante difusión promocional del proyecto en redes sociales como en Facebook e Instagram bajo el nombre @somoscomunidaddeaprendizaje, donde “comparto todo lo que hacemos al día y la ‘filosofía’ de esta comunidad”, señala esta joven que valora la experiencia de “muy positiva, ha sido una decisión totalmente acertada. El programa RALBAR me ha dado la oportunidad de desarrollar un proyecto totalmente propio centrado en mis estudios y en lo que más me gusta hacer, la enseñanza”.
DESARROLLO SOSTENIBLE EN LOS ENTORNOS RURALES
Las becas RALBAR, desean fomentar que los jóvenes se impliquen en la búsqueda de opciones para un desarrollo sostenible en los entornos rurales y, a la vez, adquieran una conexión emocional con ellos, concibiéndolos como lugares en los que poder desarrollar proyectos laborales y vitales. La Universidad de León (ULE), con la colaboración de la Fundación Banco Sabadell, convocó este año la segunda edición de estas becas consistentes en la realización de prácticas extracurriculares estivales en municipios rurales de la provincia de León, destinadas a la ejecución de proyectos de dinamización territorial que contribuyan a activar estos espacios social, económica o culturalmente, en colaboración con empresas, entidades o instituciones locales.
(Fotografías: Primera: Andrea Díez Moyano el día de la presentación de los proyectos seleccionados del programa RALBAR 2022, el pasado mes de junio en la Facultad de Educación. / Segunda, Cuarta y Sexta: niños y niñas de la localidad de Valderrueda en las primeras actividades desarrolladas del proyecto en este mes de julio. Tercera: uno de los huertos realizados que los participantes cuidan y vigilan cada día. / Quinta: buzón de sugerencias abierto a todos los residentes para luego poner en común las propuestas de mejora. / Séptima: excursión durante la jornada de ayer).
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